capitulo 27

—Me apetece tomar algo —dijo miley para cambiar de tema.

—Yo me tomaría un buen coñac, pero parece que sólo te puedo ofrecer limonada —dijo escuetamente. —Hagamos esto antes de que me ponga más nervioso.

Ella lo miró extrañada.

—¿Cuándo te has puesto tú nervioso? —le preguntó.

—El día de nuestra boda. Me dio por imaginar que no te ibas a presentar. Es de risa, la verdad, teniendo en cuenta lo que pasó un tiempo después.

Él nunca le había dicho eso, y a miley se le encogió el corazón. Después de lo que él le había hecho, no había vuelto a confiar en nadie más. Pero eso ya daba lo mismo.nick sólo quería a desty, y ella no era más que parte del trato.

Sin embargo, se dijo que no quería pensar en eso. Tenía que hacer una tarea y tenía que hacerla bien para no perder a su hija.

-disculpen interrumpir- dijo denise detras de la puerta

-no tranquila mamá, estabamos hablando de lo feliz que nos sentimos de estar aqui con ustds.

-que rico que se sientan felices , ademas tienes una esposa de portada de revista y mi nieta ni se diga.

-bueno , pero ahora a lo que vine .

-estamos todos en la terraza tomando unos refrescos porque no pasan .

-bueno , vamos.

Se sentaron todos en la terraza desde donde había unas espectaculares vista, y tomaron un vaso de limonada fresca que estaba deliciosa. Al ratito, destiny empezó a moverse como solían hacer los niños pequeños, y nick se la llevó a ver el jardín, dejando a miley al lado de denise.

—Cuando nick vino a verme aquí después de dejarle tú, me quedé sorprendida porque jamás lo había visto tan angustiado. Espero no volver a verlo así —le dijo en voz afable y miró a miley a los ojos. —¿Lo amas, miley? —le preguntó.

miley no tuvo problema en contestar con toda sinceridad.

—De todo corazón. Pase lo que pase, siempre lo amaré. denise arqueó las cejas con expresión interrogativa.

—¿Esperas que pase algo?

miley se reprendió para sus adentros por meter la pata; se suponía que debía mostrarse confiada, no dudosa.

—Sabrá mejor que nadie que las cosas no siempre salen como uno las planea...denise. La mujer suspiró.

—¿Estás bien, miley? Has puesto una cara muy triste. ¿Quieres hablar conmigo de algo?

miley negó con la cabeza y sonrió.

—No es nada, de verdad. ¿Adónde habrán ido nick y desty?

—Seguramente a la piscina. Vamos a buscarlos, y de paso te enseño el jardín.

Después de pasar un rato paseando por el amplio y bello jardín, miley llevó a desty a su habitación, que estaba llena de juguetes que la familia jonas le había comprado. Después de lavar un poco a la niña, la dejó jugando mientras ella iba al dormitorio que compartiría con nick.

entró vio que nick estaba cambiándose de camisa, desnudo de cintura para arriba. Él levantó la vista cuando ella cerró la puerta.

—¿desty está bien? —le preguntó nick.

miley asintió al tiempo que su pensamiento quedaba anulado para dar paso a la sensualidad.

—Está jugando —le informó ella con voz ronca mientras admiraba su torso vigoroso.

Sintió tantas ganas de acariciarlo que instintivamente apretó los puños para no hacerlo.

—Tu mamá ha debido de saquear la tienda de juguetes .

nick se echó a reír.

—Como no sabía lo que le gustaba, seguramente le habrá traído un poco de todo. No te olvides que tiene cinco años de cumpleaños y Navidades que recuperar.

Su risotada dejó a miley azorada; sin embargo, una fuerza mayor la empujó a avanzar hacia él.

—Acabará siendo una niña consentida.

—Sin duda, eso es lo que mejor hacen los abuelos —concedió mientras miraba la hora en su reloj de pulsera— Será mejor que te des prisa. Gina te ha deshecho la maleta —añadió mientras se volvía hacia la cama donde estaba su camisa limpia.

miley no podía apartar los ojos de su torso desnudo, cuyos músculos se movían con cada leve alteración. La atracción era tan fuerte que miley se convenció de que nada le impedía acercarse un poco más y tocarlo. El quería que hiciera el papel de mujer enamorada, ¿no?

—Mmm —suspiró mientras le plantaba las palmas de las manos en la espalda. —Qué piel más suave.

nick no dio exactamente un salto, pero se estiró de inmediato con evidente tensión.

—¿Pero qué demonios estás haciendo? —rugió.

En su tono de voz detectó algo que le hizo sonreír, porque acababa de notar que él no era inmune a ella.

—Tocándote —le respondió en tono ronco. —Estoy locamente enamorada, ¿no te acuerdas? Si vas a pasearte medio desnudo, no puedes esperar que no reaccione —añadió mientras continuaba acariciándolo. —¿Te gusta esto? —prosiguió al tiempo que le deslizaba las uñas por la columna vertebral.

Supo que sí por su modo de suspirar; y también por su miembro erecto. Posó con suavidad los labios sobre su espalda, deleitándose con la tersura de aquella piel caliente. Y sin darse cuenta siquiera bajó los ojos, le abrazó la cintura y subió las manos hasta acariciar su pecho amplio y fuerte.

Inmediatamente nick la agarró de las muñecas —¡Ya basta! —le ordenó con rabia, apartándose lo suficiente para tener espacio; se volvió hacia ella. —Estoy seguro de que has aprendido muchas cosas desde que te separaste de mí, pero no quiero que practiques conmigo.

La acusación le dolió.

— ¿De verdad es eso lo que piensas? ¿Sabes una cosa, nick? ¡Eres un mentiroso! A mí me has trasmitido algo muy distinto —le respondió, complacida al ver que él trataba de disimular su ereccion.

En ese momento, miley se apartó de él y bostezó.

—Además, no hace falta que te molestes tanto; sólo estaba practicando. Para hacer mi papel bien —se burló mientras abría unos cuantos cajones hasta encontrar el top que estaba buscando. —¿Qué tal lo hago? —preguntó, volviéndose hacia él.

nick la observaba como un halcón, y sólo el hecho de saberlo le hizo a miley mucho bien. Al menos no la ignoraba.

—Confía en mí —dijo él finalmente. —No necesitas ninguna práctica.

miley sonrió.